“En una competición, si piensas mucho, te paras y dices: ¿Qué estoy haciendo aquí? Uno tiene tiempo de pensar en la carrera y en lo que viene, pero plantearte por qué estás ahí…¡es mejor no hacerlo!”. Como deportista profesional, Marc Pinsach dedica sus tiempo a poner el cuerpo a punto para que rinda en las competiciones, y ello implica el entrenamiento al uso, que es el que se ve, y otro que también es importante: el invisible, es decir, el reposo.
¿Cuántas horas de entrenamiento sumas por temporada?
Al año entreno unas 750 horas corriendo en la montaña, esquiando o en bici. Luego hay que sumar otras que paso en el monte que, aunque no son forzosamente de entrenamiento, también están. Como necesitamos el monte para entrenar, los deportistas también vivimos en él, así que pasamos ahí todo el año. Ojo, hay casas y calles asfaltadas y hay internet, ¡no es tan distinto a la ciudad!
«La gracia es variar el entrenamiento para que el cuerpo se mosquee y busque adaptarse»
¿Cómo repartes esa horas de preparación?
De estas horas de entrenamiento no todas son a 150 pulsaciones por minuto. Algunos días tienen intensidad y se llega a 180; otros, de recuperación, marcamos 130, y, los de volumen, unas 150. La gracia es variar para que el cuerpo se mosquee y busque adaptarse. Es como una balanza en equilibrio entre la destrucción, que es lo que hace el entreno, y la construcción, que es lo que sucede durante el descanso o entrenamiento invisible.
Corres y esquías. ¿Qué diferencia hay entre las dos disciplinas?
Correr es un deporte más sencillo que el esquí, más primitivo. El hombre lo ha hecho desde que se puso a dos patas. El esquí de montaña requiere más tecnología, tanto por el material en sí como por el manejo que hay que hacer de él. A mí me gustan las verdaderas carreras por montaña, no las que te meten por una pista forestal casi llana, sino las que tienen subidas que te obligan a andar, bajadas técnicas y un ambiente alpino a cierta altitud.
«El cuerpo tiene un límite y luego llegan las lesiones»
¿Prefieres el esquí de montaña o las carreras?
No participo en más carreras porque me gusta más el esquí de montaña. Hacer las dos cosas, una en verano y la otra en invierno, es muy estresante para el cuerpo. Hay que priorizar porque solo una persona como Kilian Jornet…o Remi Bonnet, ya veremos… pueden compaginar las dos cosas y rendir bien. Yo hago menos carreras en verano y así tengo más tiempo para recuperar. Además, creo que estas pruebas hacen más mella en el cuerpo que las de esquí. Hace calor, son más largas, el impacto contra el suelo en las bajadas destruye fibras musculares que añaden estrés al cuerpo en cuanto a la recuperación. En mi opinión, en verano no hay que correr tanto. El cuerpo tiene un límite y luego llegan las lesiones.
¿Es sano el deporte de élite?
Yo creo que el deporte de alto nivel no es sano, sea esquí, carreras, bici u otro. Dicho esto, vivir en una ciudad con contaminación y fumar tampoco lo es, incluso es más dañino que el deporte de alto nivel. El grado de estrés que le metes al cuerpo no es la mejor manera de cuidar tu salud, sería mejor correr solo una hora. Ahora bien, si el deporte de alto nivel lo practicas como es debido, si le pones al cuerpo la gasolina que necesita, si vas al fisioterapeuta, escuchas bien a tu organismo para descansar cuando te lo pide, es diferente.
¿Qué riesgos hay en las carreras de esquí?
En esquí de montaña el riesgo es el propio de la competición, como caerte en una bajada por ir demasiado rápido o darte con una piedra. El peligro de aludes o de caer en un arista no es tal, por espectaculares que puedan parecer las imágenes. Los organizadores minimizan mucho el riesgo y, además, los corredores tienen en nivel para que no pase nada.
