Miquel Sunyer es un nadador de aguas abiertas y ha ideado, junto con la empresa TechnojetSwim, el proyecto de las Vies Braves, una red pública de itinerarios marinos y aguas abiertas destinadas a la práctica de actividades deportivas, lúdicas y pedagógicas como por ejemplo la natación y el buceo con tubo (snorkel). Esta iniciativa se comenzó en 2014 en la Costa Brava y actualmente cuenta con 14 itinerarios en 11 municipios de la Costa Brava, y 1 en el interior de la provincia de Girona.
Estas vías son un entorno privilegiado del que se beneficia todo tipo de deportista o amante de la naturaleza, puesto que es un entorno perfecto para el entrenamiento de los triatletas y nadadores y por otra parte los aficionados a la apnea y el submarinismo encuentran en las Vies Braves un entorno seguro para practicar actividades físicas saludables y a la vez fomentar actitudes respetuosas hacia nuestro entorno natural.
Al realizar estas actividades no solo exploramos los fondos marinos de una inmensa riqueza natural por itinerarios señalizados y balizados, sino que podemos contribuir al medio ambiente practicando el Eco-swiming o “natación ecológica”, donde aprovechamos para recoger residuos que encontramos en el fondo marino.
«Nadando en el mar me siento libre y vivo, en contacto íntimo con la naturaleza», Miquel Sunyer
Los itinerarios de cada zona se comprenden entre la Costa Brava, Costa de Barcelona, Barcelona Ciutat y Costa Daurada, que tiene la capital en turística en Salou y que acaba de entrar en el proyecto de Vies Bravas de forma que ya están presentes rutas en todo el litoral catalán. Con esta puesta en marcha ya se permite explorar nadando o haciendo snorkel más de 30 kilómetros de costa que está señalizada y balizada, y permite disfrutar explorando el litoral desde el mar de forma segura. En Pirineus de Barcelona, también puedes nadar en aguas abiertas en la Vía Brava de la Baells.
Esta iniciativa que tiene la característica de ser la pionera en el mundo mejora la salud mental y emocional aumentando nuestra producción de adrenalina. Nadar en el mar nos acerca mucho a la naturaleza y nos da una percepción de mayor libertad, la sensación de fundirse con el agua hace que nos sintamos parte del propio elemento, lo que produce en nuestro organismo efectos positivos, nos carga de energía y por consiguiente, reduce nuestro estrés. La natación es un ejercicio sin impacto pero practicarlo en el mar conlleva ser especialmente cautos para disfrutar con total libertad. Por otro lado, gracias a ello aumentamos nuestro estado de alerta y, por consiguiente, reducimos el tiempo de reacción ante cualquier imprevisto.
Pero para la gente que le preocupa la estética es destacable que mejora la silueta y que quemas 600 kcal a la hora porque los músculos trabajan más que si estuvieran en tierra firme, retrasa el envejecimiento y provoca un incremento y tonificación de la masa muscular. Y con respecto a la salud física, amplía la flexibilidad de la columna vertebral y ayuda a reducir o eliminar el dolor de espalda y favorece nuestra circulación y actividad cardiorrespiratoria.
Aunque todo esto beneficioso para nuestra salud debemos tener en cuenta unas limitaciones, ya sea el estado del mar o nuestra capacidad para el ejercicio. No debemos plantearnos hacer actividades que no están a nuestro alcance. Resultaría peligroso embarcarnos en un itinerario que requiera un esfuerzo al que no podemos llegar. Y cuando estés en una ruta sigue los consejos de uso y las recomendaciones de seguridad en la web de Vies Braves o en el panel informativo de cada itinerario marino.
8 millones de toneladas de plásticos llegan a los mares y océanos cada año
A Miquel Sunyer el hecho de practicar estas travesías y encontrarse con más plásticos y basura en suspensión que con grandes cetáceos o depredadores ha despertado en él la necesidad de iniciar el movimiento Eco-Swimming.
Para practicar el Eco-Swimming se hace imprescindible salir con una boya de seguridad y una red para transportar los residuos que encuentres, la boya tiene a la vez unas funciones tan importantes como son ayudar a la flotabilidad a la vez que te haces más visible. Aunque es conveniente ir bien equipado y no arriesgarnos a la hora de sacar un residuo del mar. Mejor prevenir que curar.
Hay que tener en cuenta que aquellos que estén a nuestro alcance debemos pensar que pueden contener algún contaminante en su interior por lo que hay que tener precaución, ya que al mar van a parar el 70% de los residuos que generamos, por desgracia. Pero aquellas latas o materiales que recojamos y que sean reciclables, debemos tratarlas correctamente y llevarlas al punto de reciclaje adecuado para que no vuelvan al mar. Esta práctica nos acostumbra a coger la basura no solo en el mar, sino cuando paseamos por la ciudad o la montaña. Y para ser aún más contributivos con el medio ambiente podemos ofrecer las ventajas de esta práctica a través de las redes sociales con las etiquetas.
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