Hace 20 años, cuando Julia Cassou usaba la cámara de fotos de su padre para retratar su entorno, para ver, observar, escuchar y transcribir historias, jamás se imaginaría lo que viviría y retrataría en el futuro. Sacaba fotos a exploradores, aventureros, montañeros…. sin imaginarse que ella un día se convertiría en escaladora y parte de un equipo de exploración y escalada de élite.
Descubrió la escalada en el año en que Tommy Caldwell y Kevin Jorgeson liberaron la vía Dawn Wall del El Capitán, Yosemite, California. Una vía de 915 metros, 32 largos y dificultades máximas de hasta 9a (de granito y adherencia!).
Tommy Caldwell y Kevin Jorgeson escalaron la vía en libre tras 8 y 6 años de intentos, respectivamente; llegaron a cima el 14 de enero de 2015, tras 19 días de trabajo al límite. Fue una liberación épica seguida en directo por gran parte de la comunidad escaladora.
En ese año Julia comenzó a escalar; y ella no pensó directamente en la escalada, pensó en lo afortunados que eran aquellos tipos que podían vivir esa aventura a través de sus cámaras, fotografiando a Tommy y Kevin, durmiendo apretujados en las hamacas en la pared, viviendo con ellos la aventura.
Siete años más tarde, su sueño se hizo realidad. Julia es la “cámara” del documental “CAPTAINS ON EL CAP”, que se estrena hoy sábado 9 de diciembre en el Bilbao Mendi Film 2023 y cuyas cara más conocidas son, en una tribu de otros 6 piratas y un perro, Sébastien Berthe “Seb” y Siebe Vanhee (estos días escalando en Yosemite).
Objetivo: repetir, en libre, el Dawn Wall, viajando hasta allí de forma pirata. El Dawn Wall, además de esos dos de 9a, tiene más de diez largos de entre 8a y 8c.
La simiente del documental nació cuando Seb compartió su loco sueño con sus colegas, en torno a una hoguera: “Seamos piratas, atravesemos el Atlántico en un velero y vayamos a escalar grandes paredes a Yosemite”. Me imagino que los que escucharon el proyectito seguirían unos segundos con la mirada perdida puesta en el fuego. Ninguno sabía navegar, parecía algo imposible; pero la brasa del sueño ya se había encendido y el resto fue, poco a poco, haciéndose posible: encontraron a dos navegantes optimistas y el que a la postre fue su hogar sobre el mar, el velero Samsara. Nombre de origen sánscrito que significa rodar, dar vueltas, renacer.
El 8 de octubre partieron los piratas desde el muelle de Torredembarra, Tarragona. Pasaron por Gibraltar, Canarias, las islas Guadalupe, hasta el Caribe mexicano. 7 escaladores, un perro y un destino: llegar a Yosemite al mínimo impacto ambiental -y al máximo impacto explorador- posibles.
Ayer por la mañana, mientras melancólico veía llover por la ventana, el que escribe pensaba en la “necesidad” que tengo de viajar, explorar, de escalar algo salvaje en un lugar con mucha luz y poca gente; mientras apuraba el café recordaba aquel viaje al Todra, en Marruecos, con mi pareja, cuando no teníamos hijos. Me vino a la mente su cara de susto cuando escalé un largo supuestamente asequible pero, en realidad, resultó ser de infarto; un diedro con una fisura ciega, difícil de proteger, y sin suficiente material por falta de pelas y prudencia. Justo cuando mi cabeza pasaba de esas imágenes del Todra a otras de un proyecto/sueño norteafricano que se está gestando, … justo entonces me llegó al móvil el trailer del “CAPTAINS ON EL CAP”. Bip-bip.
Lo primero que sentí al ver el trailer fue la curiosidad por saber lo que siente una persona que, ya no de segunda de cordada (que de por sí ya tiene su mérito), sino colgada a 500 m del suelo, observa en hierático silencio y saca fotos a un colega que enfrenta un infernal largo de 9a de granito … con un final dinámico horizontal de dos metros.
Curiosidad por escuchar a Julia e intentar ver a través de sus lentes. Brian, el codirector del documental, me puso ayer mismo en contacto con ella; me respondió desde las paredes de Villanueva del Rosario. Quedamos en hablar por la tarde.
¿Qué se siente al montarte por primera vez en ese velero que te va a -intentar- llevar al otro lado del Atlántico? ¿Se pone la amistad en juego en las noches de tormenta?
¿Qué se siente al llegar por primera vez al Camp 4 de Yosemite, sabiendo que ahí estuvieron Jay Jardine, Jim Bridwell, Lynn Hill, Dean Potter, entre otros muchos?
Y, al estar colgada a 450 metros del suelo, en el más estricto silencio, observando a tu colega pelear un largo extremo, ¿te tiembla la mano en la cámara?
Cuando se montaron en el Samsara por primera vez como navegantes que iban a ser, el sentimiento de valentía fue compartido, me aclaró Julia. La ida hasta México fue más sencilla, por la predominancia de los vientos de popa. En el viaje de regreso pasaron más miserias, incluyendo un huracán. Todo ello hizo que la amistad fuese poco a poco transformándose en una hermandad. Con los hermanos se puede discutir, se puede pasar una crisis. Siempre seguirá siendo hermano/a. Es un lugar distinto del de la amistad.
Tras los 4 meses de travesía por el salitre, cuando ya se acercaban a Yosemite, su corazón bombeaba cada vez más fuerte. “¿Es tras esta curva? No, todavía no….”, le contestaba Seb. La carretera estaba helada, el paisaje totalmente nevado, tanto que Seb no reconocía bien el valle en esas condiciones.
Tras el trayecto por carretera desde México hasta California…. tras todo eso a sus espaldas, finalmente en un momento Seb dice: “creo que es después de ese túnel!”. A partir de ese instante a Julia le cuesta respirar, le brotan las lágrimas en los ojos…. Y al ver las paredes pregunta “¿vamos a ir ahí arriba?”.
Tras la llegada al Camp 4 comenzó el baile de verdad. Siebe y Seb trabajaron la vía durante mes y medio, alternando días de escalada con días de descanso. Después se centraron en varios largos clave, sobre todo el largo 14. Dos días on, dos días off, …. para intentar domar a la bestia.
Durante esas primeras semanas perdieron toda confianza para incluso liberar largos individuales. Hasta que escalaron y comenzaron a liberar los largos. La confianza creció y, con ella, la liberación de algunos largos clave.
Tras 7 días en la pared, finalmente Seb se prepara para escalar el largo clave, el 14, a unos 450 metros del suelo. En el intento previo se había caído en el último paso, justo antes de la cadena, donde se encuentra Julia. Mientras Seb escala de nuevo hacia ella, aquella chica que siempre disfrutó siendo parte de la aventura a través de sus lentes, puede ver y sentir ahora en la cara de su ya hermano, la tensión, las dudas, el miedo y también su determinación para escalar exprimiéndose al máximo. Esta escena, ya fijada en su retina, la acompañará siempre.
En total Julia se pasó 33 días en la pared documentando la escalada de dos escaladores muy especiales, Seb Berthe y Siebe Vanhee; de esos que aprietan como pocos y a la vez se les ve un desparpajo especial para vivir y escalar con humor, con mallas de pantera ochenteras old school; seguro que también pasaron por momentos difíciles. Para la gama completa de colores del viaje-exploración y escalada, toca ver el docu.
El sábado 9 de diciembre, a las 17h, emiten el documental en el BBK de Bilbo, siendo esta una de las 57 películas que se emitirán este año en el BBK Mendi Film Bilbao Bizkaia. Festival de emociones.
En la web del festival se puede ver el tráiler de la película, así como el resto de la programación.
A partir de hoy el documental estará disponible en distintas plataformas. Toca moverse.
Ya sea en primera, segunda o espectadora persona, nos vemos en la aventura, que es donde emergen las emociones más puras. Emociones de escalada salvaje. Pure climbing. Sauvage. Basatia.
Merci Brian, Morgan et Julia pour votre disponibilté et votre proximité. Eskerrik asko.
Iker Uranga
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