El 16 de octubre de 1986, Reinhold Messner se convertía en el primero en completar las ascensiones a los 14 ochomiles del planeta. El alpinista surtirolés hizo aquel día cumbre en el Lhotse (8.516 m) con Hans Kammerlander y cerraba un capítulo que había iniciado trágicamente en 1970 con la ascensión al Nanga Parbat (8.125 m) y el fallecimiento de su hermano Günther durante el descenso.
Han pasado 32 años exactamente desde el logro de Messner, realizado por supuesto sin la utilización de oxígeno embotellado y con media docena de nuevas rutas, pero el recuerdo en el imaginario colectivo del mundo del alpinismo ha permanecido imborrable. Aprovechamos la circunstancia para repasar la trayectoria del reconocido como más grande alpinista de todos los tiempos.
Un pionero voraz
A nadie mejor que a Reinhold Messner le encaja el apelativo de pionero. A lo largo de su vida se ha mostrado como un personaje adelantado a su época y ha protagonizado innumerables ‘primeras’. No solo fue el primero en completar los catorce ochomiles, sino que también fue el primero en hacerlo sin oxígeno, el primero en subir al Everest sin oxígeno, igual que el Gasherbrum I y el Manaslu, el primero en escalar el Everest en solitario, el primero en aplicar el estilo alpino en los ochomiles, el primero en subir dos ochomiles seguidos sin pasar por el campo base y el primero en al menos media docena de rutas en picos como el Gasherbrum I, Nanga Parbat, Everest, Kangchenjunga y Annapurna, donde ha estrenado vertientes tan emblemáticas como el Rupal del Nanga Parbat, la cara suroeste del Manaslu o la noroeste del Annapurna.
Además, Reinhold Messner está marcado por una personalidad voraz, una ambición sin límites que lo lleva a plantearse objetivos creativos y a veces aparentemente imposibles sin descanso, a acometerlos casi con ansiedad y a cumplirlos uno tras otro. Más allá de los ochomiles, también realizó las Siete Cumbres (fue el segundo en la lista que incluye la Pirámide de Carstenz, que él mismo propuso), cruzó la Antártida sin apoyo, ha escrito una cantidad ingente de libros sobre montaña y alpinismo, ha abierto una red de seis museos de la montaña e incluso ha sido europarlamentario electo por el partido ecologista italiano Federazione dei Verdi.
Los 14×8000
La trayectoria de Reinhold Messner en los ochomiles comenzó en 1970, cuando con 25 años se enroló con su hermano menor Günther Messner (23) en su primera gran expedición al Nanga Parbat (8.125 m). En un definitivo ataque a cumbre con cierta polémica con el jefe de expedición, Karl Maria Herrligkoffer, los hermanos Messner alcanzaron la cima, escalando por primera vez la vertiente Rupal, hasta entonces inédita. A continuación, iniciaron el descenso por la vertiente del Diamir y Reinhold Messner completó también la primera travesía de este ochomil, aunque pagó un trágico peaje con la muerte de su hermano durante el descenso.
En 1972, Reinhold Messner regresó al Himalaya, para enfrentarse a la virgen cara suroeste del Manaslu (8.163 m), donde firmó su segunda ruta a un ochomil y se convirtió también en la primera persona en subir al Manaslu sin oxígeno. Él fue el único en alcanzar la cumbre y durante el descenso en plena niebla desaparecieron dos de sus compañeros de expedición: Frank Jäger y Andi Schlick.
El año 1975 da inicio a lo que Reinhold Messner ha dado en llamar “el alpinismo de renuncia”, un embrión del estilo alpino en el Himalaya que renuncia a muchos de los recursos materiales y humanos del estilo pesado habitual en las expediciones de la época. También estrenó su asociación con el austriaco Peter Habeler. Ambos realizaron la primera ascensión sin oxígeno del Gasherbrum I (8.080 m).
En 1978, Reinhold Messner y Peter Habeler se convirtieron en héroes mundialmente famosos al ascender por primera vez el Everest (8.848 m) sin oxígeno, algo que incluso fuentes médicas consideraban imposible para el hombre. Posteriormente, ese mismo año, Reinhold Messner volvió a la vertiente del Diamir del Nanga Parbat, donde había desaparecido su hermano ocho años antes, y realizó la primera ascensión en solitario de un ochomil desde el campo base, por una ruta nueva que todavía aguarda la primera repetición.
En 1979 le llegó el turno al K2 (8.611 m), que Reinhold Messner había planeado intentar por la Magic Line. Sin embargo, las malas condiciones lo llevaron al espolón de los Abruzzos, que finalmente ascendió con el alemán Michael Dacher.
En 1980, Reinhold Messner protagonizó una de las mayores gestas de su trayectoria, con su ascensión en solitario y sin oxígeno del Everest, en plena época monzónica, a través de una nueva ruta por le cara norte.
En 1981, Reinhold Messner sumaba a su lista creciente de ochomiles la cumbre del Shisha Pangma (8.027 m), que alcanzó con Friedl Mutschlechner bajo malas condiciones meteorológicas.
En 1982, Reinhold Messner se convirtió en la primera persona en escalar tres ochomiles en un mismo año. En primavera, alcanzó la cumbre del Kanchenjunga (8.586 m) a través de una nueva variante en la cara norte, con Friedl Mutschlechner y Ang Dorje. Una infección en el hígado lo debilitó de forma alarmante durante el descenso, que solamente pudo completar gracias a la ayuda de un Mutschlechner con graves congelaciones. Tras descansar y curarse de su afección en Nepal, Messner fue directamente a Pakistán y a pesar de que no pudo enfrentarse a las rutas nuevas que pretendía dada la ausencia de un compañero de alto nivel como Mutschlechner (que había regresado a Europa), mantuvo sus objetivos y ascendió de forma consecutiva el Gasherbrum II (8.034 m) y el Broad Peak (8.051 m) -este último por una variante de la ruta normal-, con los pakistaníes Sher Khan y Nazir Sabir.
En 1983, Reinhold Messner inició la última fase de los 14×8000 con un nuevo compañero fuerte, muy dotado técnicamente y 12 años más joven que él, el también surtirolés Hans Kammerlander. En invierno, Messner intentó la primera invernal del Cho Oyu (8.188 m) sin éxito, pero regresó en primavera con Kammerlander y Michael Dacher para alcanzar la cumbre a través de una ruta parcialmente nueva.
A pesar de que ya los había ascendido en 1975 y 1982, respectivamente, Reinhold Messner regresó en 1984 al macizo de los Gasherbrums y realizó la primera ascensión enlazada de dos ochomiles sin bajar al campo base, con Hans Kammerlander.
En 1985, Reinhold Messner y Hans Kammerlander abrieron la cara noroeste del Annapurna (8.091 m), aunque la intensa nevada que se desencadenó en el descenso les obligó a ser asistidos por sus compañeros de expedición Reinhard Patscheider, Reinhard Schiestl y Swami Prem Darshano. Tres semanas más tarde, Reinhold Messner y Hans Kammerlander hicieron cumbre también en el Dhaulagiri (8.167 m), por la ruta normal.
En otoño de 1986, mientras Jerzy Kukuczka realizaba un sprint por los ochomiles que le había llevado a ascender seis (Dhaulagiri, Cho Oyu, Nanga Parbat, Kangchenjunga, K2 y Manaslu) desde el invierno de 1985, Reinhold Messner se afanó en completar su nómina de los Catorce. El primer desafío era el Makalu (8.485 m), que Messner había intentado sin éxito en tres ocasiones anteriores (1974, 1981 e invierno de 1986). Con Hans Kammerlander y Friedl Mutschlechner, lanzaron dos intentos a cumbre en los que tuvieron que darse la vuelta antes del tercero, que fue el definitivo y los llevó hasta la cima por la ruta normal el 26 de septiembre, en una expedición en que falleció Marcel Rüedi. Un helicóptero trasladó a los alpinistas del campo base del Makalu al campo base del Lhotse, que Reinhold Messner y Hans Kammerlander ascendieron el 16 de octubre por la ruta normal.