Martin Keller no es de los que se rinde. Escalador desde hace más de un cuarto de siglo y entrenador de escalada, es adicto a la roca y se obsesiona con problemas que están en su límite o más allá. Lo ha demostrado una vez más con la primera ascensión de Gateway, para el que propone su primer 8C+, después de tres años y 150 días de trabajo.
Dos precedentes
No es la primera vez que Martin Keller protagoniza una ascensión de este tipo. En 2012, cuando el máximo grado asentado del mundo era el 8C, estrenó una propuesta de ese grado con Der mit dem fels tanzt en Chironico, donde había pasado tres años dándole pegues. Fueron más de 100 visitas al bloque.
Se trata de una línea descubierta por Jimmy Webb y Giuliano Cameroni, situada en Ticino (Suiza).
Ya que la táctica le funcionó, la repitió en 2019 con el asedio a Ninja skills sit en Sobrio, con el que dio un paso más adelante en la dificultad hasta el8C/+. Invirtió otros tres años y más de 150 sesiones de trabajo para terminar completando la primera ascensión de la versión con entrada sentado del Ninja skills 8B+ de Nalle Hukkataival.
Su mejor bloque
El bloquero suizo está a punto de cumplir los 46 años, pero su fanatismo sigue en las mismas cotas de siempre. Y es que esta ascensión no se podría entender sin contar con una motivación fuera de la norma: “Fue otro viaje épico de tres años y más de 150 sesiones para pasar de no ser capaz de hacer los movimientos duros del crux en aislado, a quedarme muy cerca de encadenar, a romper (varias veces) la presa clave al final, a no estar seguro de si todavía saldría, a tener que reconstruir la caída después de que un árbol se la llevara, a caerme en el último movimiento duro un año antes de encadenar, a finalmente enlazar los más de veinte movimientos duros en la última noche de la temporada antes de la llegada del verano… y no resbalar en el mantle y la placa final a las dos de la madrugada en una sesión afterwork en solitario (después de un día completo de trabajo)… un final épico para un viaje épico, sin duda».
Martin Keller no tiene dudas de que Gateway es “el mejor bloque y el más duro que haya podido escalar jamás”. Y pone en valor que “no es fácil encontrar ‘tu proyecto perfecto’, una línea bonita, movimientos increíbles y duros en tu límite personal dentro de tu estilo: secuencias muy de fuerza pero también súper delicadas al mismo tiempo. ¡El pack completo!”.
Entrenamiento planificado
Como no podía ser de otro modo, Martin Keller explica las razones de su éxito en este bloque tan extremo para él en el resultado del entrenamiento: “La clave fue contar con un plan de juego efectivo y eficaz (un entrenamiento que funciona), ya que no había mucho tiempo que perder cuando trabajas como profesor y te encargas de tu propio negocio de entrenos”.
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