Iker Arroitajauregi en Txapela 8C de Albarracín
Alberto Rocasolano en Soyuz (Zarzalejo)
Nacho Sánchez en el bloque Kemena
Nacho Sánchez en Insomnio 8C (Crevillente)
Thulagi Chuli ( (7059m)
Iban Larrión en Airian 8C (Baltzola)
No hace tantos años, el máximo grado de búlder quedaba lejos de España. Quizás no tanto geográficamente, ya que Fontainebleau o Ticino tampoco están a un océano de distancia, pero sí en cuanto a tradición bloquera del más alto nivel. Pero las cosas han cambiado radicalmente y, de tres años a esta parte, la famosa «roca caliente» española ha comenzado a sonar también como escenario de impresionantes encadenamientos de búlder. En poco más de dos años y medio, seis líneas han sido propuestas como de 8C y media docena de escaladores han estrenado la página consagrada a ese grado en su libreta. Durante 2013, se han dado a conocer la mitad de esas líneas, con cinco escaladores en sus respectivos tops. Repasamos la situación de partida en 2014 de los bloques más duros del país.
Entropía , en Castillo de Bayuela
Nacho Sánchez fue el autor de la primera propuesta de 8C de nuestro país con Entropía en el sector La Clínica de Castillo de Bayuela (Toledo). Fue un encadenamiento nocturno, el martes 21 de marzo de 2011, y el murciano contó con la compañía de varios testigos de excepción como Ignasi Tarrazona , Guntram Jörg o Javi ‘Pavi’ Casas .
Entropía nació como la unión de El macho 8A+ y El lado oscuro de la fuerza 8B+, con un total de diez movimientos en desplome de granito. «Es un bloque muy completo, físico, técnico y de coordinación», resumía en aquel entonces Nacho Sánchez, que agradecía a Fernando Rey y Carlos Álvarez el haberle descubierto el bloque en cuestión y haber limpiado los cantos.
Entropía no ha tenido repeticiones, que se sepa.
Airian , en Baltzola
La famosa cueva de Baltzola fue el escenario elegido por Iban Larrión para proponer el segundo 8C del país con Airian , prácticamente un año después (marzo de 2012). La línea era en realidad la versión sin cantos pegados de Hay que masticar antes de tragar bass 8B+, inaugurada a finales de 2011 por Rubén Díaz . «En líneas generales, consiste en 18 movimientos en techo, uniendo dos 8B’s seguidos», la describía Iban Larrión.
Airian no ha tenido repeticiones, que se sepa.
Insomnio , en Crevillent
Sólo unas semanas más tarde, de nuevo era Nacho Sánchez hacía valer sus galones de mejor bloquero del país y realizaba una nueva propuesta de 8C, esta vez en la Cova de la Gota de Crevillent. Su nombre es Insomnio y su línea es más bien una pesadilla completamente desplomada: «un techo de conglomerado, con seis primeros pasos muy duros, siendo el quinto el crux y el sexto un dinámico un poco aleatorio», decía de ella su protagonista.
Insomnio tampoco ha tenido repeticiones, que se sepa.
Kemena , en Almenara
Y así, con los tres primeros 8C en el país, se llegó a 2013, un año en que se doblaría el censo y se multiplicarían los escaladores con este grado en su libreta. Bien pronto se incrementó ese terceto de líneas con la cuarta propuesta de 8C, esta vez a cargo de Rubén Díaz con Kemena en la cueva de Almenara. En un viaje acompañado por Iker Arroitajauregi y Alberto Rocasolano -curiosamente, los otros dos escaladores que estrenarían 8C’s en 2013-, Rubén Díaz realizó en febrero la primera la primera ascensión de de este «bloque explosivo de fuerza de dedos, pasos físicos y tensión corporal», que «empieza con seis pasos ‘fáciles’ para cambiar el ritmo con cuatro pasos duros y terminar con un mantle ‘fácil'», describía él mismo.
Precisamente, este fue el primer problema de 8C de nuestro país que se repetiría, el pasado mes de noviembre. Tanta ‘facilidad’ llevó a que su primer repetidor, Nacho Sánchez , incluso sugiriera que el grado de Kemena quizás estaría mejor situado en el 8B+ . En cualquier caso, ambos escaladores coincidían en la calidad del problema y en recomendarlo a la comunidad de bloquera.
Txapela , en Albarracín
Los dos últimos meses de 2013 fueron casi una vorágine de encadenamientos de 8C (cuatro de cuatro escaladores diferentes en poco más de 30 días). Coincidiendo aproximadamente en fechas con la repetición de Kemena por Nacho Sánchez , Iker Arroitajauregi se unía al club del 8C español en Albarracín. Allí, el escalador vasco realizaba la primera ascensión de Txapela , «un bloque largo en el que destaca la resistencia que tiene. Discurre por un filo que asciende en diagonal con presas en su mayoría romas», lo describe su propio autor.
Lo estético de la pieza motivó a dirigirse hasta allí a Dani Andrada quien sacó a relucir su proverbial motivación para hacerse con la primera repetición a finales de diciembre. En este caso, él sí estuvo de acuerdo con la cotación de 8C propuesta por el primer ascensionista.
Soyuz , en Zarzalejo
El último en auparse a la relación de bloques de 8C fue Alberto Rocasolano , también en diciembre. El escalador madrileño completó un proyecto que llevaba tiempo en su mente al conseguir sumarle unos movimientos más en la entrada a Soyuz en Zarzalejo que, a su juicio, justifican un salto en el grado del 8B+ de la versión anterior al 8C de la actual. Él mismo describía en una entrevista con Desnivel.com que los movimientos de la extensión «son exigentes, creo que en un bloque suelto los tres pasos añadidos rondarán el 7C+/8A, en total le añade una resistencia difícil de aguantar porque es un bloque de regletas muy pequeñas».
De momento, la versión extendida de Soyuz no tiene repeticiones.