Después de cuatro noches en la pared, el día 21 de marzo los franceses Patrick Gabarrou, Christophe Dumarest y Philippe Batoux hicieron cima en la punta Margarita tras 16 horas de escalada de lo más accidentadas: ya cerca de la cima, el propio Gabarrou fue alcanzado por una piedra desprendida y, aunque no sufrió heridas de gravedad, tuvo que ser evacuado en helicóptero al hospital de Chamonix nada más hacer cumbre. Sus dos compañeros continuaron hasta el Col des Jorasses, prolongando la travesía un día más.
La escalada se había iniciado el miércoles, 16 de marzo, cuando subieron al refugio Lechaux para emprender la escalada en la mañana del jueves. El trabajo con el que comenzaron fue duro: tuvieron que trasladar el material desde un depósito situado al pie del espolón Walker tras la tentativa fallida de enero a las mismas Grandes Jorasses.
Técnica bigwallera
Destacan los originales métodos empleados para la ascensión. Dada la longitud de la pared y la inexistencia de repisas apropiadas para descansar, se vieron obligados a usar técnicas propias del big wall, instalando hamacas para dormir en pared e izando petates. La nueva ruta requiere superar pasajes de glaciar, mixto y roca, resultando por tanto de una complejidad inusual (VI, 4R, M6, A3, 5c)
Desde que en 1935 fuera ascendida por primera vez, la cara Norte de las Grandes Jorasses es, además de «la pared perfecta» para muchos escaladores, una fuente inagotable de páginas míticas para el alpinismo.
Fuente: kairn.com