Filip Babicz no podía haber tenido un mejor bautizo de fuego en la escalada invernal británica. El alpinista y escalador italo-polaco se ha anotado la primera repetición de Bring da Ruckus (XII, 13), la vía más dura de la particular escalada invernal de las islas que Greg Boswell estrenó a mediados de enero.
A pesar de que en los últimos tiempos ha sido noticia por sus escaladas alpinas exprés y por haber participado en alguna que otra expedición en las grandes montañas del Karakórum, Filip Babicz comenzó a destacar deportivamente con encadenamientos extremos de escalada mixta y drytooling, como Ade integrale D15+ en la cueva Gran Borna u Oświecenie M16 en Zakopane.
Aventura épica
La escalada tuvo lugar el 22 de febrero cuando, “después de un intento fallido desde el suelo y de sucesivas inspecciones desde arriba, la ascensión fue realizada en estilo limpio, colocando todos los seguros mientras escalaba”.
Las condiciones nunca fueron ideales (“bienvenidos a Escocia”, bromea FIlip Babicz) y la ascensión de Bring da Ruckus cobró ciertos tintes épicos hacia el final del día. Una vez superado el largo clave, se desató una tormenta de nieve y se hizo de noche. Junto con Dawid Skoczylas, su compañero de cordada, decidieron terminar de escalar los cuatro largos que faltaban para acabar la vía. Con la ayuda del GPS se las arreglaron también para llegar hasta la cima del Lochnagar y completar así una ascensión irreprochable.
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